Capítulo 7 (Parte 2): Una Lección Extensa.

Capítulo 7 (Parte 2): Una Lección Extensa.

Partu Deorum

«El Nacimiento de los Dioses»

 

Capítulo 7 (parte 2): Una lección extensa.  

  Rodrigo se acercó a las mujeres que conversaban alegremente sobre los misterios de la naturaleza humana.

  Kara, si el bien y el mal fueran un problema tan fácil de explicar no sería un dilema para los pensadores de todo el planeta. El concepto de lo que es bueno y lo que es malo es tan abstracto y complejo que es casi imposible explicarlo ¿Cómo esperas que Jessica, una niña de menos de cuatro años, pueda comprender un tema tan complejo? Deberías de explicarle que es lo que está mal y lo que debe de evitar, así en el futuro ella tendrá un criterio sobre el cual desarrollar su propia moral.

  -Parece que ya jugaste demasiado Jessica, levántate. Tenemos mucho por estudiar si es que algún día me quieres superar ¿O vas a decirme que una pequeña que ni siquiera sabe que es lo que hay fuera del castillo me puede ganar?

  -Pero aún no he aprendido el secreto para dibujar bien.

  -Mañana Kara te lo enseñara ¿O acaso ya has olvidado que mereces una reprimenda por haberte escapado? Así que levántate porque la lección de hoy será tu castigo por ignorar tus lecciones y escapar.

  Antes de que la pequeña tuviera tiempo para articular cualquier reprimenda, Rodrigo ya la había levantado de la cintura sin darle oportunidad a cuestionarlo.

  Sin ninguna oportunidad para protestar fue cargada hasta el sofá que se había convertido en su sala de estudio usual. Frente a ella se encontraba una pizarra verde en donde Rodrigo suele escribir todas esas cosas que son demasiado complejas como para explicar con solamente hablar.

  No importan las veces que Kara haya reprochado a Rodrigo por haber sepultado la sala de estudios bajo una desordenada montaña de papeles y libros; tanto que ya se habían acostumbrado a encontrar una montaña de papel que eclipsaba por completo el interior de la habitación.

  Se había convertido en rutina ver a Kara completamente enojada reprimiendo por horas al siempre ocupado mago, mientras que la pequeña Jessica siempre aprovechaba ese momento para explorar el castillo antes de que cualquiera de los dos se diera cuenta que se había escapado.

  Por lo que las lecciones, extremadamente extensas para una niña de menos de 4 años se habían convertido en el pan de cada día de la princesa, y tal parece que hoy tampoco lograría escapar de esa espiral de la recurrencia.

  Una vez más hay se encontraba la princesa, sentada firmemente en el sofá esperando a recibir la lección que su maestro estaba a punto de improvisar por completo.

  La clase comenzó con una practica de control de maná, es natural pues es la esencial para un mago el poder controlar su maná, especialmente en el caso en que tu vida depende de lo bien que lo puedas manejar.

  El trabajo de Jessica era de hacer levitar su libro frente a ella, esa era la razón principal por la que no había ninguna mesa en esta habitación. Debía de mantener su libro estable, como si estuviera reposado sobre una firme mesa de madera, mientras que garabateaba toda la información que Rodrigo le soltaba.

   En un principio el ejercicio puede parecer una completa estupidez, pues es mucho más fácil utilizar una mesa que malgastar maná en una actividad tan casual, pero era precisamente porque es una actividad mundana y usual que su relevancia es vital. Pues era indispensable para ella el poder manejar su maná como si fuera una extremidad más, que fuera tan fácil como respirar.

  Los magos más avanzados como Rodrigo, controlaban el maná a su alrededor incluso cuando estaban dormidos. Utilizándolo para tareas tan mundanas como temperar la habitación o mejorar su respiración, esta práctica se había comenzado a popularizar hace poco cuando Rodrigo les explico su método de entrenamiento a los magos de la Universidad.

  Este es el tipo de entrenamiento que los ancianos llaman “Fácil de aprender, pero difícil de dominar” pues era una actividad que requería de una dedicación brutal para llegarla a dominar. Pues en el papel suena demasiado simple de dominar, pero cual músico debe de practicar todos los días con el fin de ser familiar con el instrumento que ha de tocar, los magos deben de aprender a manejar su maná para siquiera poder comenzar a soñar con encantar.

  El hechizo de levitación se basa en un principio muy simple, generar una corriente de aire bajo el objeto lo suficientemente fuerte como para mantenerlo flotando. Es estúpidamente fácil de imaginar, pero terriblemente difícil de realizar, controlar una sustancia invisible y errática como lo es el aire, se convierte en un problema mucho mayor una vez que lo comienzas a manipular.

  Para hacer que el libro se mantenga fijo en su lugar se deben de generar al menos cuatro corrientes de aire, el problema es que cada corriente debe de empujar al libro desde una posición distinta y con la misma fuerza para evitar que el libro salga volando. Mientras que deber de aumentar o bajar la fuerza de las corrientes siempre que quieras moverlo o escribir sobre él… Aunque el mayor problema era conseguir que las hojas del libro no se moviesen como quisieran.

  La mayoría de los magos avanzados manejaban directamente la gravedad de los objetos cuando los querían hacer levitar, el problema con esto es que los objetos solo flotan, por lo que no tienes ningún tipo de control sobre el movimiento que tendrán. Por lo que, cuando lo que quieres hacer es entrenar, es mucho más eficiente usar el viento en su lugar.

  – ¡Comencemos la lección! Hoy hablaremos de la historia de nuestra querida capital. Han pasado once años desde que Jorge I fue coronado como el rey de nuestra nación, lo que no mucha gente sabe es la razón por la que tomó tan prematuramente el mando del reino. Pachni siempre ha tenido una profunda rivalidad con Geiasou, nuestro vecino más cercano, esto se debe a que los anteriores gobernantes siempre han deseado apoderarse de las grandes minas que tiene el territorio de Geiasou. Por otra parte, nuestro querido vecino nos odia debido a que nosotros tenemos un increíble puerto. Esta discordia genero cientos, sino es que miles de años, de guerras entre nuestras naciones. Tu abuelo, el rey Octavio V, no fue la excepción. Temeroso por una inminente invasión por parte de Geiasou, el rey Octavio V formó una alianza con Pagómeros, el país de los barbaros que domina el otro costado de la cordillera Colmillo Blanco. Esta precipitada acción solo consiguió elevar la tensión entre nuestras naciones, dando origen a una furtiva ola de secuestros que llevaron a cabo los espías en la capital. Su motivo era conseguir una cantidad de rehenes con el peso suficiente como para hacer desistir a nuestra nación de realizar una invasión frontal. Pero tu abuelo no fue llamado “lobo despiadado” solo por la gran fuerza de sus brazos, él ya había preparado a los soldados para la invasión mucho antes de haberse aliado con los barbaros de Pagómeros. La invasión se había planeado con varios meses de anticipación, y la alianza se había vuelto formal solo para consternar a Geiasou y así tener una causa digna por la cual ir a la guerra. No paso una semana para que las murallas de la capital de Geiasou fuera tocada por las tropas de nuestra nación.

  Rodrigo… por favor… porque tienes que comenzar a hablar de algo tan interesante mientras me haces hacer una práctica tan complicada. No te caigas librito, por favor quédate tranquilito…

  La concentración de la princesa se esfumo, y con ella el libro voló ¿Cómo se supone que mantenga la compostura ante la revelación, de que se propio abuelo, realizó un hecho tan atroz?

  – ¡¿Porque el abuelo hiso eso?! ¿Qué paso con las personas que secuestraron? ¿Cómo pudo aliarse con los barbaros? ¿Somos los malos?

  -No hablare hasta que hagas que ese libro esté en el aire una vez más.

  – ¡Es injusto! ¿Cómo quieres que me concentre si me cuentas una historia tan emocionante?

  – El libro en el aire…

  Rodrigo se reusó a hablar hasta ver al libro flotar una vez más, incluso él se sintió mal al hacer que la pequeña se levantara de su lugar solo para buscar un tomo casi tan grande como su propio torso.

  -Ahora ya podemos continuar… Las tropas de nuestra nación habían llegado a la capital de Geiasou, pero los guardias de la ciudad ataron a los rehenes a las murallas como un último intento desesperado para no ser saqueados. Ese fue el día en que el Rey Octavio V se convirtió en un monstruo, sin siquiera pensarlo, mandó a los soldados a cargar contra las enormes puertas de madera… Las mismas puertas donde estaban clavadas las personas por las que la guerra había comenzado. Así fue como nuestro país conquistó Geiasou… Pero la llegada de tu padre al poder trajo consigo una revolución que liberó a su nación en el famoso “día de la independencia”. Es por eso que hoy en día podemos disfrutar de una relación amistosa con Geiasou, todo gracias al idiota de tu padre.

  -Padre es increíble, logró derrotar a una persona tan tenebrosa como el abuelo. También liberó a la gente de… ¿Cómo era?

  -Geiasou

  -De ese lugar ¡Cuando vea a Papi lo voy a abrasar muy fuerte por su gran trabajo! ¡Mi Papi es el mejor!

  -Aunque sea un egoísta, no puedo negar que hiso un buen trabajo. Pero ahora mismo es momento de que vuelvas a levantar el libro que acabas de botar, nuestra clase aún está lejos de terminar.

~Θ~

  En una habitación demasiado ostentosa como para ser usada como una simple sala de conferencias, se encontraba el gobernante de una gran nación, leyendo, escribiendo y firmando cientos y miles de informes.

  A pesar de que él mismo desearía estar en otro lugar, no puede darse el lujo de olvidarse de trabajar en un momento tan crucial. Pues al tomar uno de los informes se enteró de una realidad que no deseaba aceptar, las tropas de Pagómeros se estaban movilizando una vez más.

  Tal parece que el resentimiento cultivado a lo largo de los años es imposible de olvidar, en especial para una nación que en los tiempos modernos ha sido forzada a mendingarles a sus antiguos enemigos sin parar.

  Después de que se diera la revolución en Geiasou, el reino de Pachni dejo de comerciar con Pagómeros, bajo la triste excusa de que no deseaban provocar más conflictos a la pobre población que ya había sido conquistada y torturada por su nación.

  La gente de Geiasou fue utilizada como esclavos desde el primer momento después de haber sido conquistados, pero ninguna persona fue tan maltratada como los esclavos de los barbaros. Tal era el horror al que eran condenados, que la mayoría de los esclavos que eran comprados por un bárbaro preferían quitarse la vida con sus propias manos antes de llegar a ser utilizados.

  Ello generó un temor general entre la gente de Geiasou, haciendo que cada habitante odie con todo su corazón a sus vecinos los barbaros.

  Este odio fue lo que le impido a Jorge entablar una relación con Pagómeros. Pues cada intento de cruzar la frontera era saboteado por una muralla de granjeros asustados.

  Lo peor fue la helada que arrasó el continente unos años después del fin de la guerra, pues fue el país de Pagómeros quien más sufrió por la venganza de la naturaleza. El mar se congeló, los animales de las montañas que solían alimentar a la población fueron reducidos a nada más que trozos de hielo sepultado bajo el mar de nieve que cubría todo el país.

  Pero las barbaries que la gente tuvo que llevar a cabo para sobrevivir ese invierno sigue morando en las perturbadas mentes de los afectados.

  Aun tiemblo cuando escuche la historia de los hijos del emperador de Pagómeros, quienes tuvieron que comerse a su propia madre para lograr soportar el invierno ¿Quién hubiera imaginado que una simple ventisca logrará llevarlos a tales extremos?

  Quien habría imaginado que incluso los arboles terminarían siendo sepultados en la nieve, y que los monstruos convirtieran dominaran el territorio. Tal fue la brutalidad de esa catástrofe que quedo marcada en los libros de historia de todo el continente como “El infierno blanco” un imponente recordatorio de lo despiadada que puede llegar a ser la naturaleza.

  Por todos los desastres que tuvo que pasar, además de la notable falta de recursos para mantener a su población actual. Solo era cuestión de tiempo para que el ejército de Pagómeros reuniera sus tropas y comenzara a invadir al resto de los países.

  Tal parece que su primer objetivo será el territorio de Faleanus en el norte de Geiasou, después de todo es el más cercano a su frontera, además de ser el territorio más lejano de nuestra capital. Por lo que, mover nuestras tropas hasta hay será demasiado difícil de lograr en tan poco tiempo.

  Eso, por supuesto, si yo fuera un gobernador normal. Pero es una lástima que esos barbaros me tengan como enemigo, eso y que sus estúpidos ciudadanos sean tan corruptos como un slime de baño. Solo por lanzarles un par de monedas y facilitarles una casa entre los plebeyos estuvieron dispuestos incluso a envenenar a sus generales. Simplemente es hermoso cuando todas las piezas se mueven al ritmo al que quieres.

  Descuida mi querida Jessica, tu amado padre se ocupará de estos sucios brutos de una buena vez. En muy poco tiempo estarás saltando de alegría en los brazos de tu héroe, al ver como he logrado liberar al mundo de estas ratas bárbaras.


Autor: Aldohnc