Muchos piensan que inventar algo es simplemente un momento de genialidad y presto, está listo el invento listo para venderse por millones y dejarle ganancias titánicas a su inventor, pero no puede haber nada más diferente a la realidad, y hoy quiero decirles cómo es que los milagros ocurren en la vida real.
Primero que nada, hay que comenzar con el inventor como tal que tiene que reunir tres condiciones vitales: ser sumamente curioso, tanto como para meterse incluso en problemas para saciar su curiosidad; ser listo, y a esto no me refiero con ser un genio o un erudito, con ser simplemente alguien que sepa unir piezas ya es suficiente; y por último tener interés en resolver ese problema con sus propias manos. Esto es una constante en todos los inventores que existen, muchos sólo se les considera genios en otras eras, un ejemplo de ello es Tesla, quien en su momento fue alguien tildado de loco con dos que tres cosas interesantes, ahora se dice que él diseñó nuestro mundo.
Una vez esto listo pasa a la parte más aburrida de todo el proceso, y la que normalmente es la más barata, la investigación: tienes que aprender todo de ese tema, tanto como te sea posible, no dejar una piedra sin remover, incluso leyendo más temas, pues no sólo un tema es el importante, un buen ejemplo es cómo hacer una botella de plástico, cualquiera pensaría que sólo se necesita saber del plástico y ya, pero no, se necesita hacer los moldes, para ello hay que conocer el material de estos, para que sean resistentes y fácilmente trabajables, luego de eso hay que saber de sistemas neumáticos, para inflar la protobotella y que esta tome la forma del molde, luego hay que saber cómo el calor fluye de la botella al molde y de ahí al exterior para poder enfriarse y caer sin deformarse; todo esto sólo para una simple botella de plástico.
En el proceso anterior podemos investigar hasta miles de temas hasta el cansancio, todo depende de lo que quieran lograr, pero una vez hecho esto el segundo paso es más sencillo.
Y este segundo paso es: equivocarse, así es. Tienen que hacer prototipos que solucionen el problema, y se los aseguro, no es posible que si es un problema grande salga a la primera, serán varios prototipos que caerán en el proceso, Edison tuvo que hacer más de 100 modelos de bombillas para encontrar la que fuera lo suficientemente barata para producirse y lo suficientemente duradera para funcionar por un buen tiempo. En esta es donde de verdad está el dinero perdido, o invertido, como lo quieran ver, pues en cada prototipo hay que hacer pruebas y verificar que todo funcione, aquí es donde puedo darles un ejemplo de lo caro que es, todas las medicinas tienen al menos 10 años de trabajo detrás de ellas cuando salen, donde científicos probaron miles de compuestos para algo específico, luego de eso lo probaron en animales, luego en humanos y luego en forma masiva en humanos por años para asegurarse que funciona y no es peligroso, por eso es que las medicinas son caras, porque se requirieron millones de dólares para descubrirlas.
Luego de este proceso ya tienes tu invento correctamente hecho, y es donde tú decides qué harás, si lo quieres liberar gratuitamente será algo que te dejará como un héroe, o al menos como alguien de muy noble corazón, pero si en cambio lo vendes podrías ganar cientos o miles de dólares, incluso millones si es algo excelente, pero eso sí, ya no será tuyo el invento.Por último puedes producirlo y venderlo tú, es tuyo, ganas dinero, pero es mucho lío venderlo, pero eso es para otra historia.
Como pueden ver son pasos simples, pero que tienen cantidades de tiempo y esfuerzo que dan cierto miedo a los que entran por primera vez en el mundo de la invención, pero como inventor e ingeniero en formación se los digo, no hay nada mejor que ver tu invención trabajando y haciendo para lo que la diseñaste.
Autor: Lalo