Emperor Dragon Capítulo 10: Capital Real de Oram

Emperor Dragon Capítulo 10: Capital Real de Oram

Capítulo 10: La Capital Real de Orem

El detective Ligan está aquí… es broma.

El viaje transcurrió sin problemas después de lo de Jenrri. Encontramos monstruos en el camino, pero les dejé todos los que no eran goblins a Rufio y compañía.

Finalmente, llegamos a la esperada capital, lo que conlleva a las despedidas.

«Entonces, ¿seguro que no trabajarás para mí?»

«Lo dije nueve veces por día durante todo el viaje. No»

«Espero que te valla bien con tu vieja amiga»

«Ven conmigo un momento, Rufio»

«Claro…»

Me llevé a Rufio a un lugar ligeramente alejado de los demás, aunque no para hacer nada raro.

«Anaís está enamorada de ti»

«¡¿Qué?!»

Por eso nos alejamos. El tipo es ligeramente escandaloso.

«¿Te lo dijeron los espíritus…?»

«… Eso no hacía falta. Creo que fuiste el único durante el viaje, y quien sabe cuánto tiempo más, no se dio cuenta»

En serio, lanzaba más señales que semáforo, y hasta hablaba sola de lo mucho que le gustaba a veces. No les daré más detalles porque no me gusta meterme en las vidas de los demás.

«… ¿Qué hago?»

«Eso lo decidirás tú. Yo ya hice mucho, pero sé que te gusta»

«N-no se a lo que te refieres»

«Hablas dormido»

«Ah»

«Bueno, antes de irme, déjame decirte que Dolan tiene el sueño de tener una familia y administrar su propio negocio de comida. Si llega el momento, no lo detengas»

«¿Eres un acosador?»

«¿Alguna queja?»

«En absoluto»

Con tal conversación, me despedí del primer amigo que hice viajando. Claro que no les daré detalles, eso es privado, así que si quieren algo confórmense con su imaginación.


Bueno estoy en la capital. Me gustaría hacer turismo, solo que no debe quedar mucho tiempo para las pruebas de la academia, y no puedo perder el tiempo, por lo que me dirijo directamente al lugar.

La capital es tal como lo esperarías. Grandes edificios, variedad de puestos y…

«¡Suéltame!»

Criminales cliché sin remedio.

«Lo siento, señorita, solo nos divertiremos un poco»

«Si, solo diviértete tranquilamente con nosotros»

«Solo dolerá un poco»

Ese último ni siquiera se molestó en cuidar sus palabras. Todos alrededor parecen indiferentes, aun cuando la víctima es una niña de unos trece años, por lo que entro en acción.

«Disculpen, me parece que es de mala educación causar tan mal rato a una dama, por lo que les pediré que se detengan»

«Solo nos divertimos, por lo que no tienes nada que hacer aquí»

«Sí, solo es un poco de diversión»

«¡Lárgate, bast…!»

Le propino a los tres una patada donde más les duele. Por supuesto que castrante. Creo que llamaré esta técnica «Men Killer».

«¿Te encuentras bien?»

«¿Eh? S-si»

«¿Necesitas que te acompañe a algún lugar?»

«Me dirijo a la academia…»

«Casualmente yo también, por lo que te acompañaré, pero no te recomiendo aceptar esas ofertas en el futuro, porque hay tipos más discretos que ellos»

«¡S-si!»

Siento que podríamos llevarnos bien en el futuro. Le cae bien a los espíritus. Como sea, vamos a la academia de una vez.


«Bueno, llegamos»

«Gracias por todo»

«No te preocupes, fue un capricho mío. Asegúrate de cuidarte mejor de ahora en adelante. Mi nombre es Ligan, por cierto. Espero volver a verte pronto»

«¡Si! Yo me llamo Mercury»

No sé qué responder, pero estará bien. Tiene un nombre de otro mundo.

Ambos fuimos por distintas rutas de la academia, separándonos. Bueno, tengo que llevarle la recomendación. Él también administra las pruebas, también.

«¿Quién eres y cómo llegaste?»

La persona que dijo eso fue una mujer joven de aspecto estricto. Sip, otra de las razones por las que vine… bromeo… tal vez.

«Mi nombre es Ligan, vengo a ver al director para las pruebas»

«Otro plebeyo ¿eh?, asegúrate de no causar problemas»

«Tenga por seguro que no haré tal cosa»

Cuando dije eso entré a la oficina del director. Me pareció que su rostro mostraba un poco de sorpresa, pero eso no es relevante.

«Buenos días»

«Buenos días, mi nombre es Ligan. Es todo un placer conocerlo, Director Gregory»

«¿Como estás seguro de que soy el director?»

«Porque usted es el único elfo de la academia»

«¿Y cómo sabes eso?»

«Me lo dijeron los espíritus cuando llegué»

El director, que tiene aspecto de hombre de mediana edad, puso una extraña expresión cuando dije eso.

«¿Puedes ver espíritus?»

«Tal vez se deba al hecho de que mi abuela es de la raza élfica»

«Es así. Mis amigos me dijeron el motivo de tu visita. ¿Tienes alguna carta de recomendación?»

Con sus amigos debe referirse a los espíritus. Saco la carta de recomendación del Barón Rosen y se la entrego.

«Ya veo. Estás oficialmente admitido. Espero muchas cosas de ti»

Con eso, dejé la academia y comencé a prepararme para las pruebas.

Capítulo 10… FIN

 

Mil gracias a nuestra querida editora, Rosi